jueves, 19 de noviembre de 2009

ALAKRANA:

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10.La sorprendente retrosía.| 02/Nov/2009 | 09:41:43h

No es nada sorprendente, Mari.

Lo que es sorprendente es que la "casposía retrosista"
se pase la vida hablando del libre mercado
pero éste no incluya la libertad de circulación del factor trabajo.

Nuestras mercancías y servicios a libre práctica en vuestros países,
pero vuestros trabajadores que se queden en casa.

Y sí,
estamos esquilmando sus caladeros,
precisamente porque el mar no tiene fronteras.

Occidente pretende que el mar territorial tiene abarcar las doce millas
hasta que algunos Estados occidentales,
Canada entre ellos,
deciden aumentarlo hasta doscientas.

Luego en alta mar, en aguas internacionales, decimos que el mar es libre,
y les envíamos a barcos de explotación industrial a gran escala
que se llevan en días lo que los pescadores de estos lugares
tardarían decenas de años en pescar.

Y claro, los que no entienden de fronteras son los peces;
éstos no se quedan en las doce millas marinas de Somalía o Nigeria
para que sus pescadores cobren las capturas que les "pertenecen territorialmente".

Si agotamos la pesca en alta mar ellos se quedan sin pescan en sus aguas territoriales porque los bancos se mueven libremente.

El mar es algo más que "libre"; es res commune ommiun, que decía los romanos. Pertenece a todos.

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